Vamos a estudiar una contradicción hoy que encontramos en esta web (como siempre) y que en esta ocasión nos indica que hay dos textos en el antiguo testamento que difieren en cuanto a dos listados de las personas que regresaron del exilio en Babilonia.

Esdras 2.15

De Adín 454

Nehemías 7.20

De Adín 655

Lo que vemos aquí es un recuento de los repatriados cuando se terminó de construir la muralla de Jerusalén después del cautiverio de Babilonia, «…es decir, de aquellos que Nabucodonosor, rey de Babilonia, se había llevado cautivos, y a quienes se les permitió regresar a Jerusalén y a Judá…» (Nehemías 7.6) El listado de Nehemías se hizo en Judea y el de Esdras en Babilonia, de hecho hay varias diferencias más dentro de estos listados:
Familias Nehemías Esdras
Araj 652 775
Pataj (Jesúa y Joab) 2818 2812
Zatú 845 945
Bebay 628 623
Azgad 2322 1222
Adonicán 667 666
Bigvay 2067 2056
Adín 655 454
Jasú 328 223
Bezay 324 323
Belén y de Ntofa 188 179
Betel y Hai 123 223
Lod, Jadid y Ono 721 725
Sená 3930 3630
Además también se observa una discrepancia en los nombres escritos apareciendo muchos más nombres en el libro de Esdras que en el de Nehemías.
Lo más probable con toda esta situación es que, como el listado de Esdras fue redactado mucho tiempo antes que el de Nehemías el primer listado contendría el número de personas que tenían la intención de regresar a Israel, pero seguramente, bajo muchas circunstancias (muertes, enfermedad u otros obstáculos) no pudieron regresar. Podría estar argumentando durante algunos párrafos sobre esta contradicción en concreto, y normalmente no me gusta hacer lo que voy a hacer ya que considero que hacer el esfuerzo de escribir las conclusiones con mis propias palabras hace que aprenda más, pero me parece que:
  1. Esta contradicción se me antoja banal, sin chicha, no transcendente. Lo explicaré al final.
  2. Matthew Henry lo hace mucho mejor en su comentario y aclara definitivamente el problema, no sólo esta contradicción, sino muchas otras semejantes:
«Se explica la discrepancia satisfactoriamente por la diferencia de circunstancias en que fueron hechos los dos registros: el de Esdras fue hecho en Babilonia, mientras que el de Nehemías fue confeccionado en Judea, después que fueron reedificados los muros de Jerusalén». Naturalmente, se esperaría que un lapso de tantos años haría que apareciese una diferencia en el catálogo, por fallecimientos u otras causas; en particular, que alguna persona, según la costumbre judía, sea llamada por nombres distintos. De esta manera, Harif (v. 24) es la misma persona que Jorá (Esd. 2:18). «Bendigamos a Dios porque nuestra fe y nuestra esperanza no están fundadas en sutilezas de nombres, números, genealogías y cronologías, sino en las grandes verdades de la Ley y del Evangelio.»
En mi opinión encontrar que un listado difiera de otro en cuanto a números o nombres convertiría al texto en algo poco fiable si este se tratara de un libro que hablase de listados de personas. Pero ni Nehemías ni la Biblia es un texto de genealogías. Y aunque contenga muchas; decir que es contradictorio es como decir que un artículo sobre la teoría de cuerdas es contradictorio porque el listado de las personas que participaron en los experimientos para respaldar dicha teoría difiere en la primera revisión del artículo de la segunda revisión. Aunque difiera, todo lo que dice el artículo tiene sentido, una diferencia en esos listados no destruye la esencia de lo que se quería decir y tampoco invalida la veracidad de lo escrito y mucho menos significa que sea contradictorio.
Concluimos por tanto que NO ES UNA CONTRADICCIÓN.

EDITO: La contradicción Bíblica XIV es exáctamente igual que esta pero en el caso de los descendientes de Adonicam. Así que la zanjamos de igual manera.